La Confederación Argentina de Básquetbol (CAB) ha emitido una sanción contundente contra el Club de Regatas de San Nicolás, tras los graves incidentes ocurridos durante el pasado fin de semana en el Final Four de la Liga Federal Sub-21. Esta medida marca un golpe significativo para la institución náutica, que deberá enfrentar las consecuencias de los disturbios registrados, así como sus antecedentes disciplinarios recientes.
La CAB ha decidido inhabilitar al Club de Regatas por un año para participar en torneos nacionales de la rama masculina de mayores. Esta inhabilitación abarca todas las competencias organizadas por la entidad nacional, lo que implica que Regatas no podrá disputar ninguna de las ligas más importantes del básquetbol argentino en ese período. Además, el club ha recibido la suspensión provisional de su cancha, lo que afecta su participación en competencias locales, provinciales y nacionales. Aunque inicialmente se sugería que el club podría seguir compitiendo en el Pre Federal, esta posibilidad quedó descartada tras las declaraciones del presidente Marcelo Pallioti de la Federación de Básquet de la Provincia de Buenos Aires, quien afirmó en una entrevista radial que Regatas no podrá continuar en dicho certamen.
Otra consecuencia directa de los hechos es que el Final Four Sub-21, que había sido suspendido tras los incidentes, se reanudará el 19 de octubre en el complejo «Diego Armando Maradona» de Zárate. Sin embargo, esta fase final se disputará a puertas cerradas, y todos los gastos de organización correrán a cargo del Club de Regatas, en una clara muestra de la magnitud de la sanción impuesta.
Los hechos que desencadenaron esta dura penalización no fueron revelados en detalle, pero los antecedentes de situaciones conflictivas recientes habrían contribuido al castigo. El club, uno de los más tradicionales de la ciudad, se encuentra en una posición complicada, ya que su inhabilitación afectará tanto a la proyección de sus categorías mayores como a la competitividad de su equipo en torneos futuros.
Esta sanción llega en un momento delicado para el básquet de San Nicolás, ya que Regatas se encontraba compitiendo en el Pre Federal y había tenido una destacada participación en torneos previos. Ahora, con la imposibilidad de continuar en esa liga y sin la opción de ascenso, el club enfrenta una situación de incertidumbre tanto deportiva como institucional.
La decisión ha generado diversas reacciones en el ambiente del básquet nicoleño y provincial. Si bien algunos ven la sanción como un castigo ejemplar necesario para evitar futuros incidentes, otros consideran que las consecuencias son excesivas y que podría afectar el desarrollo de una institución histórica en la región.
En cuanto a lo que viene, Regatas tendrá que enfrentar esta sanción con una reestructuración de sus actividades deportivas y buscar la manera de cumplir con las exigencias impuestas por la CAB para poder regresar a la competencia nacional en el futuro. Mientras tanto, la comunidad basquetbolística seguirá de cerca el desenlace de este difícil momento para uno de los clubes más representativos de San Nicolás.