CARLOS ALCARAZ volvió a recuperar el estado de ánimo y la alegría adentro de la cancha: luego de una lesión que lo alejó del Masters 1000 de Montecarlo, el número dos del mundo se consagró campeón en el ATP 500 de Barcelona, el prestigioso Conde de Godó, gracias al triunfo en la final por 6-3 y 6-4 ante el griego Stefanos Tsitsipas (5°).
El español de 19 años no jugaba desde principios de mes, cuando cediera el número uno del mundo a manos del serbio Novak Djokovic luego de acusar, en el torneo de Miami, una artritis postraumática en mi mano izquierda y algunas molestias musculares en la columna.
Durante lo que va de la temporada Alcaraz acumuló varias lesiones. Mientras estuvo sano, sin embargo, logró muy buenos resultados: fue campeón en Buenos Aires, finalista en Río de Janeiro, campeón en Indian Wells, semifinalista en Miami y, ahora, campeón en Barcelona.
«Ha sido una semana maravillosa para mí, siempre es muy bonito jugar aquí en casa delante de los míos. Ha sido una terminación de semana como hubiéramos esperado y ha sido increíble jugar aquí en Barcelona. Tengo la oportunidad de jugar ante toda mi familia y de todos mis amigos, que son con los que me he juntado desde que tengo 10 años, 11 o 12. Me siento muy afortunado de haber podido vivir esta experiencia hoy aquí con ellos», reflexionó el jugador entrenado por el ex número uno Juan Carlos Ferrero.
Alcaraz tiene la intención clara de pelear por volver a ocupar el primer puesto del ranking ATP. Con los puntos de Barcelona, ahora Djokovic lidera el ranking con 7135 unidades y el español acumula 6770. La brecha es de apenas 365 puntos.
La semana próxima Alcaraz defenderá mil puntos por haber salido campeón en Madrid y Djokovic debería que revalidar 360, aunque no estará en el torneo por una lesión. El español no tiene probabilidades matemáticas de superarlo tras este torneo pero podría pisarle los talones.
El número uno más joven de la historia del ranking también tiene el objetivo de pelear por el título en Roland Garros, pero decidió ir paso a paso: «Aún queda un tiempo para Roland Garros. Todo puede pasar en estos dos torneos, en estas semanas. Roland Garros es un claro objetivo a corto plazo. Es un torneo que tengo muchas ganas de ganar, pero ahora estamos enfocados en Madrid y Roma».
