Hace una semana atrás, el nicoleño Gonzalo Garavano anotaba tres goles en la victoria de su equipo Atlético Tucumán ante Estudiantes de Caseros, por la Copa Argentina y le dio el pasaje a los 16avos. de final.
Garavano en declaraciones a la página oficial de la competencia decía lo siguiente:
Marcar tres goles en un partido es un premio para el esfuerzo diario que realizan los delanteros en cada práctica. En el partido de 32avos. de la Copa Argentina que enfrentó a Atlético Tucumán con Estudiantes de Buenos Aires, Gonzalo Garavano apareció en todo su esplendor para erigirse como la figura de la clasificación del Decano al anotar los tantos del sufrido 3-2.
“Es una sensación muy linda, primero por haber pasado de ronda y obviamente también por mi actuación. Nunca había podido hacer tres tantos en un partido de mi país. Es algo que siempre había soñado”, expresó el delantero de 28 años, quien de todas maneras no cree que este haya sido su mejor partido. “Fue el más contundente, pero hubo partidos en los que jugué mejor y quizás me faltó un poco de contundencia”, agregó.
Increíblemente, Atlético es el primer club argentino donde juega Garavano. El atacante empezó su carrera en las divisiones menores del Ragusa italiano, y transcurrió su carrera en distintos países de Europa y América hasta que a principios de este año recaló en el conjunto dirigido en aquél entonces por Jorge Solari. “Estaba de vacaciones en San Nicolás, mi pueblo de origen, y el técnico de La Emilia me pidió que jugara un amistoso con ellos ante Atlético. Ahí jugué un gran partido, motivo por el cual Solari quiso llevarme y por suerte pude arreglar rápido con los dirigentes”, comentó.
Con respecto al equipo, el punta admirador de Hernán Crespo remarcó sus sensaciones acerca del comienzo de temporada, que fue de menor a mayor. “Arrancamos muy flojos, tanto en lo personal como en lo grupal, y eso derivó en la salida de Solari. Con Llop mejoramos, nos fuimos soltando, y dimos un par de batacazos importantes ante River y Rosario Central. Por suerte pudimos seguir avanzando en la Copa también”, manifestó. Además, trazó los objetivos de cara a este año: “Primero tenemos que sumar la mayor cantidad de puntos posibles en los encuentros que restan hasta el parate, así tratamos de acomodarnos en la tabla para intentar pelear el ascenso”.
De sus varios pasos por el fútbol internacional, Garavano resaltó su estadía en Portugal, país en el que estuvo tres años e incluso llegó a jugar en Primera. En Estrela Amadora vivió una de las principales contradicciones que puede tener un futbolista: estar en un equipo competitivo que peleó las dos competencias (fue semifinalista de la Copa, y sexto en el campeonato) pero donde no recibió plata por ocho meses. “Fue un sabor amargo, porque nos rompíamos en cada partido para luchar arriba y no recibíamos dinero. Se vivieron cosas para los que no estás preparado”, aseguró.
Un paso importante del delantero fue en Venezuela, donde conoció a César Farías, actual entrenador de la Vinotinto. Ahí forjaron una estrecha relación que se mantiene hasta estos días. “Farías fue uno de los técnicos que más me marcó. Me acuerdo que en Mineros me bancó de titular cuando no convertía, y se llegó a pelear con la hinchada. Incluso cuando él llegó a la Selección me propuso nacionalizarme, pero preferí esperar una chance en mi país. Todavía sueño con eso”, se ilusiona un delantero que sabe que tiene que mantener este rendimiento si quiere concretar su aspiración de vestir la camiseta de Argentina.
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