Fede Chiostri y Gonzalo Alfonso se recibieron de “maestros” El nicoleño y el cordobés se consagraron campeones del Master de la Asociación de Jugadores Profesionales de Pádel, el torneo que reunió a las mejores parejas de la temporada. Chiostri finalizará el año como el número tres del país. “Estoy súper contento por haber terminado el año de esta manera”, le contó Fede a EL NORTE.
“El año que viene la idea es poder volver a España tres meses a competir, y mientras tanto seguir compitiendo en el circuito AJPP y APT, que es un circuito nuevo que se juega en toda América”, contó Chiostri. La primera fecha de ese torneo continental es en Mérida (México) el 13 de enero. Allí estará presente el nicoleño, por lo cual tendrá un paso fugaz por nuestra ciudad hasta el 5 del próximo mes, cuando comience bien temprano a competir en el 2020.
El torneo
La dupla Chiostri-Alfonso debutó el viernes venciendo a Dip-Mandrile por 7/6 y 6/3. El sábado a la mañana llegó el partido de casi cuatro horas ante Cejas y Soliverez, el cual el nicoleño y el cordobés ganaron 6/7, 7/5 y 7/6. Por la tarde, fue derrota 6-1 y 7-5 frente a Melgratti-Frugroni, que los clasificó para semifinales como segundos en el grupo y los obligó a enfrentar a los número uno de la otra zona. Así reflejó el sitio especializado PadelNetwork la definición del campeonato: “En la segunda semifinal resultaba temerario arriesgar un resultado. Si era por pergaminos, el campeón defensor y el campeón de ediciones anteriores llevaban ventaja. Leo Aguirre y Cristian Ozán aparecían como candidatos. Si era por actualidad, los #3 y #4 de la Argentina se mostraban en mejor forma, sobre todo después de su reunión un par de meses atrás, con éxito rotundo. Pero faltaba un dato. Si Aguirre-Ozán jugaban como el sábado cuando cerraron la zona B, ganaban seguro. Y más, si Chiostri-Alfonso repetían el bajo nivel de su tercer partido de zona, perdían en dos. Nada de eso pasó. Aguirre-Ozán no fueron los mismos y a la vez, Fede y Gonza levantaron su nivel de manera exponencial, reflejando todo lo bueno que los había traído hasta este fin de semana como pareja 1. Y desde el principio hasta el fin, aunque por diferencias que no fueron abultadas, manejaron el partido ante el Tolito y el Misil con mucha suficiencia, mostrando lo mejor de sí y turnándose para sumar puntos, más allá de algunos monólogos del cordobés de General Cabrera, que por momentos se comió la cancha. Fue 6/4 6/4 y pasaporte a la final para que en la definición del Master quedaran las parejas que habían ocupado el segundo puesto en cada zona. Insólito”.
En la final, Choistri y Alfonso enfrentaron a Nicolás Egea (número uno del país) y a Franco Dal Bianco, que debutaba en un torneo de Maestros. “Dal Bianco explotaba al máximo su primera experiencia en el torneo, aguantando la presión como un veterano de guerra y sorprendiendo a todos.
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Pero la gran pareja que armó con Nicolás Egea no pudo hacer nada contra el poder de fuego que mostraron Gonzalo Alfonso y Federico Chiostri, dos sacados que arrasaron una vez que pudieron destrabar el primer set y terminaron pavoneándose con un 6/4 6/0 que equivale a la graduación como maestros con diploma de honor”, definió el periodista Uri Leczycki en su crónica.
De un año a esta parte Federico Chiostri ha demostrado una madurez notable, que le permitió literalmente resurgir de las cenizas después del tremendo golpe que significó la pérdida irreparable de su amigo Gonzalo Salías, con quien habían tenido un muy buen cierre deportivo en 2018. Justamente después del Master del año pasado, un accidente fatal separó para siempre a una pareja que tenía destino de gloria, y dejó al nicoleño en una encrucijada cuya salida estaba –cuanto menos– poco clara. Sin embargo Fede no bajó los brazos, recogió la fuerza de sus afectos y transformó en energía los mejores recuerdos para volver al ruedo.
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En el camino, encontró en Gonzalo Alfonso a la pareja ideal tanto en lo deportivo como en lo humano, y por eso los resultados llegaron de inmediato. Ahora, con todas las fuerzas de un presente arrollador y un pasado que lo empuja hacia delante, el nicoleño se prepara con las mejores expectativas para un 2020 lleno de desafíos.
Fuente: Diario El Norte