El equipo del Barrio Somisa viajó hasta la localidad de Pergamino, a disputar el partido de vuelta por el torneo Federal C, ante el elenco de Argentino de esa ciudad.
En la ida, el local se había quedado con la victoria con el agónico grito de su capitán Frontini sobre la hora. Este era el momento para ir a defender esa victoria a tierras pergaminenses y con condiciones adversas por completo para ambos planteles ya que una lluvia copiosa inundaba más y más el verde césped del blanquiceleste y aunque el balón picara “como podía” Marcos Vega, de San Pedro (árbitro,) decidió que el encuentro debía jugarse.
Cuando un juego se desarrolla en un campo “encharcado”, por donde se lo mire, lo más probable es que salga un partido friccionado, jugado como se puede, con fuerza, poniendo lo que se debe poner en cada jugada aunque sea resbalando entre el agua. Y se dio así. Y Somisa consiguió ganar en un terreno difícil revirtiendo la eliminación del torneo anterior y haciéndose con una victoria justa por el “plus” que puso en cada línea, por el sentimiento con la camiseta y por la lectura acertada del partido que hizo su entrenador saliéndolo a jugar de igual a igual como si el encuentro fuese en el barrio.
A los 27 del primero Zárate de cabeza puso la ventaja somisera y así se fue el acto, con Somisa ganando y sosteniendo el resultado a favor porque el local tuvo varios disparos desde lejos o a la salida de corners que pusieron en peligro la valla de Ponte.
El segundo recibió al local con dos chances clarísimas. Una de corner que tras un cabezazo la pelota dio en el poste izquierdo y volvió mansa al 1 azul y la otra de la misma manera pero esta vez el esférico se fue por arriba. A la vuelta y en los primeros minutos, Frontini “guapea” por derecha, llega al fondo y le sirve el gol a Maggi que sentencia el juego aunque las condiciones del campo y de juego no hacían suponer un partido liquidado ya que se avecinaban más goles seguramente. Fiol, el cuatro pergaminense, descontó de cabeza a los veinte y el equipo de Perez se fue a buscar los goles que necesitaba y el nicoleño salía de contra con Frontini y compañía. Argentino tuvo varias más con rebotes en el área sin poder concretar el gol y en una con Ponte atajando, a puro reflejo, tras un fusilamiento a medio metro.
El equipo de Natali contaba con los requisitos para obtener la victoria ya que se hacía fuerte en todos los sectores. No sabría explicar con justeza cuáles son esas condiciones cuando el terreno de juego luce de esa manera, pero estaba claro que el equipo de Del Acuerdo no podía quedar afuera.
Ponte, Martinez, Slavin, Malín, Villaroel, Lescano, Sawicz, Tomasini, Maggi, Frontini y Zárate cualquiera de ellos fue la figura. Todos tuvieron argumentos para ser elegidos. Sobresale entonces, el equipo, su coraje, su enjundia, ese “plus” y su valor. Además, destacar la lectura perfecta y la planificación de partido que hizo su entrenador, Walter Natali, que condujo a sus dirigidos a la victoria en tierra ajena y en condiciones adversas, bajo agua.
Enviado especial Mauricio Santucci